sábado, 14 de diciembre de 2013

Presentación

En secundaria, existe alumnado que falta al instituto de forma injustificada, que se escapa del centro durante el recreo o se esconde en dependencias de éste para no asistir a determinadas clases, y/o que incluso simula estar enfermo para poder irse a casa. Además, suele llegar tarde, en especial, a la primera clase de la mañana y a las clases posteriores al patio, a pesar de encontrarse ya en el centro. A menudo se distrae con facilidad, habla con los/as compañeros/as, hace dibujos en la agenda y/o en el mobiliario, se maquilla en clase e incluso llega a dormirse. Este alumnado no suele realizar los deberes y olvida o extravía el material necesario para seguir las clases, tiene dificultad para conseguir los objetivos de aprendizaje mínimos planteados, siendo muchos de ellos repetidores, y una vez que alcanza la edad de 16-17 años, suele abandonar los estudios, sin ni siquiera haber finalizado la ESO.
En mi opinión, este escenario pone de manifiesto, entre otras cosas, la falta de interés y de motivación hacia el aprendizaje que presenta gran parte del alumnado de secundaria. El objeto del presente blog es aportar información que facilite al profesorado identificar las necesidades motivacionales del alumnado hacia los aprendizajes desde una orientación global a fin de dar una respuesta lo más adecuada posible a nivel grupal. Pretendo, a su vez, que este blog se convierta en una fuente de conocimiento para el profesorado por lo que agradecería a todos cualquier aportación relacionada con el tema propuesto.

Estructura del blog

En la parte superior del blog tenemos las siguientes pestañas.
  • Presentación. Corresponde a la pantalla inicial en la que se explica el objetivo del blog y la estructura del mismo.
  • Marco teórico. Muestra una recopilación de información relacionada con el tema tratado, es decir, teorías explicativas, encuadre conceptual y encuadre metodológico relacionado con la motivación.
  • Evaluación. Muestra los criterios seguidos en el proceso de evaluación de las necesidades motivacionales del alumnado.
  • Intervención. Contiene el diseño del programa de intervención.
  • Unidades. Explica en qué consisten las unidades de intervención diseñadas.
  • Actividades. Pretende ser una base de datos en la que encontrar actividades para realizar con el alumnado relacionadas con las unidades planteadas. Están incluidas también las actividades para el profesorado y para las familias.
  • Desarrollo del programa. Son en cierta medida unas notas de campo de aspectos surgidos durante la aplicación de las actividades.
En la parte lateral tenemos un bloque llamado etiquetas que permite visualizar las entradas relacionadas con temas concretos. Tenemos además otro que permite localizar la información a partir de la fecha de introducción de la misma.

viernes, 13 de diciembre de 2013

Perfil grupal

A partir de la valoración grupal y en función de las metas, género, dificultades de aprendizaje y actitud ante las tareas escolares se determina una serie de perfiles a los que responde el grupo. Globalizando dicha información se concretaría toda una serie de rasgos y actitudes característicos del grupo y, por tanto, su perfil grupal.
Una vez que tenemos definido el perfil del grupo obtenido a través de este proceso de evaluación, podemos definir los objetivos y los contenidos adaptados a las necesidades motivacionales de éste.

Criterios de valoración del cuestionario para padres. Valoración grupal

El cuestionario para los padres proporciona una información cualitativa en función de la puntuación obtenida. Además, permite verificar si éstos aplican satisfactoriamente o no una serie de pautas.
Cuando los padres aplican una determinada pauta muchas o muchísimas veces (las dos puntuaciones mayores) he considerado que su aplicación es satisfactoria. En caso contrario es deficitaria.


Para la valoración grupal sólo hay que establecer un margen a partir del cual se considere que la aplicación de la pauta es deficitaria en el grupo.
En mi caso he considerado que una pauta es destacable en el grupo cuando un 65% o más de las familias presenta déficit en la aplicación de la misma. Un porcentaje más restrictivo supondrá un menor número de pautas destacables en el grupo.

Criterios de valoración del cuestionario para docentes. Valoración grupal

El cuestionario para los docentes permite verificar si éstos aplican satisfactoriamente o no una serie de pautas.
Cuando el docente aplica una determinada pauta muchas o muchísimas veces, he considerado que su aplicación es satisfactoria. En caso contrario es deficitaria.


Para la valoración grupal sólo hay que establecer un margen a partir del cual se considere que la aplicación de la pauta es deficitaria en el grupo.
En mi caso he considerado que una pauta es destacable en el grupo cuando un 65% o más del profesorado presenta déficit en la aplicación de la misma. Un porcentaje más restrictivo supondrá un menor número de pautas destacables en el grupo.

Criterios de valoración. Valoración grupal

El criterio para determinar que un factor hay que considerarlo a la hora de determinar el perfil del grupo es que dicho factor se comporte en éste de una forma diferente a lo que sería normal y que dicha desviación respecto de lo normal sea de una magnitud suficientemente significativa como para considerarlo destacable.
Para poder identificar que factores tienen un comportamiento diferente del normal en el grupo, el mecanismo utilizado es la comparación con la campana de Gauss. Al utilizar baremos actualizados y puntuaciones normalizadas (percentiles) para el grupo, la representación gráfica de las mismas debería corresponder a una campana de Gauss centrada en los valores medios, es decir, el percentil 50. Por tanto, el comportamiento será diferente del normal si la representación gráfica se desvía de dicha campana de Gauss centrada en el percentil 50.


Al tener pocos alumnos en el grupo, la representación gráfica presenta múltiples picos y valles lo que dificulta la comparación con la campana de Gauss. Por esta razón, se utiliza la agrupación PENTA según la cual las puntuaciones del alumnado se agrupan en cinco intervalos delimitados por los percentiles 7, 31, 69 y 93 minimizando así las diferencias entre individuos y facilitando dicha comparación.
La representación gráfica de las puntuaciones agrupadas para un factor cuyo comportamiento fuera normal debería ser similar a una campana de Gauss centrada en el percentil 50 que ahora estaría situado en el intervalo central. De esta manera, para el factor "Ansiedad inhibidora del rendimiento" se observa que la representación gráfica agrupada es similar a la campana de Gauss centrada en el percentil 50 (intervalo central) y, por tanto, no sería un factor a considerar  a la hora de determinar el perfil del grupo.
 
 
Para poder identificar qué factores presentan una desviación suficientemente significativa como para considerarlo destacable en el grupo, el mecanismo utilizado es la utilización de diagramas sectoriales y el establecimiento de un margen a partir del cual se considera dicha desviación destacable. El establecimiento de un margen más restrictivo supondrá que el número de factores destacables sea menor.
 
 
Establecidos estos criterios de valoración, la valoración grupal se limita a realizar estas agrupaciones, analizar las representaciones gráficas agrupadas y determinar qué factores son destacables en el grupo a la hora de definir su perfil motivacional.

Cuestionarios. Valoración individual


Para el análisis de las variables personales y contextuales del alumnado se hace uso de una serie de cuestionarios que permiten obtener una puntuación directa de las mismas. Posteriormente mediante el uso de baremos actualizados se transforma dicha puntuación directa en una puntuación normalizada, en nuestro caso el percentil.
Dichos baremos se han establecido a través de unas amplias muestras de población por lo que responden a una distribución normal cuya representación gráfica corresponde a una campana de Gauss.
 
 

Proceso de evaluación


El proceso de evaluación comienza con la realización de una serie de cuestionarios para la adquisición de información.
A partir de dichos cuestionarios y mediante el uso de un baremo obtenemos una valoración individual.
Posteriormente, mediante la aplicación de una serie de criterios que hay que establecer podemos convertir dichas valoraciones individuales en una valoración grupal.
Por último, a partir de estas valoraciones grupales y en función de determinados aspectos (metas, género, dificultades de aprendizaje y actitud ante las tareas escolares) se establecen una serie de perfiles que tras globalizarlos nos permiten determinar una serie de rasgos y actitudes propias del grupo y, por tanto, su perfil grupal.